Nuestro Fundador
Mons. Claudio María Dubuis
El Obispo Dubuis era un hombre de una fe muy fuerte y de una confianza inquebrantable en la Divina Providencia; estaba convencido de que las necesidades desesperadas de los enfermos y de los numerosos niños huérfanos de su diócesis podían recibir respuesta a través de los servicios de un grupo de religiosas. En vista de que no puedo recibir ayuda de las comunidades de Estados Unidos, escribió cartas a varias ordenes religiosas en Francia, incluyendo a su amiga, La Madre Angelique, superiora de la Orden del Verbo Encarnado y el Santísimo Sacramento, una orden religiosa de clausura, en Lyons, Francia.
La carta que el escribió refleja un llamado persuasivo y dinámico.
«Nuestro Señor Jesucristo, sufriendo en una multitud de enfermos y desvalidos de todas clases, espera en alivio de vuestras manos».
C.M. Dubuis
Obispo de Galveston
21 de Septiembre de 1866
Para leer la carta completa, da clic aquí.
La Madre Angelique, conmovida por esta solicitud urgente, recibió en el monasterio a tres jóvenes que habían respondido a este llamado. Después de un breve periodo de preparación, estas jóvenes viajaron a Galveston.